Recomendaciones para el uso del Agua

El agua es una fuente de vida insustituible y fundamental para el desarrollo de la sociedad. Además de ser esencial, el agua es un recurso agotable y cada vez más escaso a escala mundial.

 

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TSUNAMIS: Como sobrevivir

Un tsunami es una serie de olas destructivas y muy peligrosas que son el resultado de la actividad sísmica o de otro tipo de alteración submarina. En los años recientes los tsunamis han ocasionado una cantidad increíble de daños. Para sobrevivir a un tsunami, debes estar preparado(a), vigilante y mantener la calma. Este artículo expone algunos pasos que pueden serte útiles para sobrevivir a un tsunami, dado que estamos en los meses de verano y la afluencia es masiva a las playas

1 Aprende con anticipación sobre los peligros potenciales. Es importante que tengas en cuenta con anticipación si el sitio donde vives puede verse afectado por un tsunami. Es probable que estés en riesgo si:

Tu hogar, escuela o lugar de trabajo se encuentra en una región costera cercana al mar.

La elevación de tu hogar, escuela o lugar de trabajo está al nivel del mar, en un nivel bajo sobre una superficie plana o en un terreno poco ondulado. Si no conoces el nivel de elevación de tu hogar, escuela o lugar de trabajo, averígualo. Algunas autoridades locales utilizan la elevación como un indicador de alarma.

Hay señales de alarma que indican que tu área es propensa a los tsunamis.

Las autoridades locales emitieron información sobre las probabilidades de un tsunami.

Se quitaron las barreras naturales del mar como los diques de arena por motivos de desarrollo.

2 Ten en cuenta si los tsunamis golpearon tu región costera en el pasado. Investiga en la biblioteca o pregunta en la oficina de gobierno local. La Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA por sus siglas en inglés) tiene un sitio web que permite buscar riesgos de inundaciones.

La mayoría de tsunamis ocurren en lo que se conoce como el "cinturón de fuego"; un área en el océano Pacífico conocida por su actividad geológica. Chile, el oeste de los Estados Unidos, Japón y las Filipinas son zonas especialmente vulnerables.

3 Preparar materiales esenciales en un lugar al que puedas acceder fácilmente. Si hay un tsunami (u otro desastre natural), es probable que necesites rápidamente algunos artículos de supervivencia. Puede ser útil tener preparados paquetes de seguridad y supervivencia:

Prepara un paquete de seguridad. Algunos elementos básicos necesarios son la comida, el agua y un botiquín de primeros auxilios. Guarda el paquete de seguridad en un lugar evidente, conocido por todas las personas en la edificación y que sea fácil de alcanzar en caso de emergencia. También puede ser útil dejar un impermeable u otro tipo de abrigo para cada persona cerca del paquete de seguridad.

Prepara un paquete de supervivencia personal para cada persona de tu familia y un paquete de supervivencia familiar con artículos comunes para todos. Incluye un suministro de medicamentos necesarios para cada miembro de la familia. No olvides los artículos de supervivencia para tus mascotas.

4 Desarrolla un plan de evacuación. Debes preparar con anticipación un plan de evacuación para que pueda aplicarse. Al momento de desarrollar el plan, ten en cuenta a tu familia, tu lugar de trabajo, tu escuela y a la comunidad en general. Si es necesario, empieza a desarrollar un plan de evacuación para toda la comunidad en el caso de que no se esté llevando a cabo ninguna actividad preventiva.

Toma la iniciativa para comenzar a desarrollar el plan e involucra a las autoridades locales y a otros residentes. 

La falta de planes de evacuación y sistemas locales de alarma pone a tu familia, la comunidad entera y a ti en un riesgo más alto de lesión o muerte durante y después de un tsunami.  

Estos son los elementos que deben formar parte de un plan de evacuación exitoso:

Discute con tu familia y tus colegas sobre las diferentes opciones de evacuación. Por ejemplo, ten en cuenta en qué lugar puedes reunirte con tus seres queridos luego de un tsunami.

Lleva a cabo simulacros para asegurarte de que todos los miembros de la comunidad tienen claro lo que tienen que hacer y a dónde tienen que ir durante una evacuación.

Incluye un plan que asegure un recuento de cada miembro de la comunidad y la ayuda a las personas discapacitadas o enfermas.

Asegúrate de que la comunidad entienda con anticipación las señales de alarma y evacuación. Distribuye folletos u organiza conferencias para asegurarte de que todas las personas están al tanto. Lee los términos de notificación de un tsunami.

No olvides proporcionar varias rutas de evacuación, ya que es posible que un terremoto destruya las carreteras u otras infraestructuras y evite que las personas escapen por medio de algunas rutas.

Ten en cuenta los tipos de áreas protegidas que puedan existir en las zonas de evacuación. ¿Es necesario construir con anticipación este tipo de albergues?

Reconoce las señales reveladoras de un tsunami

1 Sé especialmente cuidadoso(a) luego de un terremoto. Si vives en una zona costera, un terremoto debe ser un motivo importante para dar la alarma e iniciar la evacuación de inmediato.

2 Presta atención a los ascensos y descensos rápidos de las aguas costeras. Si el mar retrocede de repente y deja tras su paso arena pura, es una señal de alarma importante de que está a punto de ocurrir un incremento repentino del nivel del agua en el interior.

3 Fíjate en cualquier cambio de comportamiento extraño en los animales. Presta atención a los animales que se van del área o que tienen comportamientos anormales, tales como ir en busca de albergues humanos o agruparse de maneras que no lo harían normalmente.

4 Presta atención a las alarmas del gobierno y la comunidad. Si las autoridades locales tienen tiempo de emitir una alarma, presta atención. Infórmate con anticipación sobre la manera en la que las autoridades locales planean advertir a la comunidad para que no te equivoques ni ignores la alarma cuando llegue el momento. Comparte dicha información con familiares, amigos, vecinos y la comunidad. Si las autoridades locales tienen folletos, un sitio web u otras fuentes de información, pide que las distribuyan a las personas o solicita copias para hacerlo por tu cuenta.

Evacúa después del tsunami

1 Abandona tus pertenencias. Si hay un tsunami, salva vidas y olvida las pertenencias. Al tratar de salvar tus pertenencias puedes perder tiempo valioso y entorpecer tu escape. Toma tu paquete de seguridad, algo que te mantenga tibio(a), tu familia y vete del lugar inmediatamente. Los sobrevivientes de los tsunamis actúan con rapidez y generalmente no se molestan en tratar de salvar pertenencias.

2 Dirígete hacia un terreno elevado alejado de la costa. Si es posible, lo primero que debes tratar de hacer es alejarte de la costa, los lagos u otros cuerpos acuáticos y dirigirte a un terreno elevado, incluso a las colinas o las montañas. Sigue alejándote hasta que estés a 3.200 metros (2 millas) de la costa o a 30 metros (100 pies) sobre el nivel del mar.

Puedes suponer que el tsunami destruirá por completo las carreteras. Si planeas usar las carreteras para llegar al lugar al que quieres ir, reconsidera. Un tsunami completo destruirá varias carreteras, ya sea por la actividad sísmica del terremoto o por la acción del tsunami mismo. Mantén un buen sentido de la dirección general a la que vas y considera guardar una brújula en tu paquete de supervivencia.

3 Sube a un lugar alto. Si estás atrapado(a) y no puedes alejarte de la costa, ve hacia arriba, aunque no es lo ideal ya que la estructura misma puede colapsar. Sin embargo, si es tu única opción, encuentra una edificación alta, sólida y robusta y ve hacia arriba. Sube tanto como puedas, incluso hasta el techo.

4 Escala un árbol robusto. Como último recurso, si estás atrapado(a) y no puedes alejarte de la costa ni subir a una edificación elevada, encuentra un árbol firme y alto y escala tanto como puedas. Existe el riesgo de que el tsunami arrastre los árboles, por lo que realmente esta es una medida que debe utilizarse únicamente si las otras alternativas son imposibles de llevar a cabo. Tus probabilidades de sobrevivir serán proporcionales a la firmeza y la altura del árbol, además de la robustez de las ramas (donde quizás tengas que permanecer por varias horas).

5 Reacciona rápidamente si quedas atrapado(a) en el agua. Si no pudiste evacuar y el tsunami te arrastra por una razón u otra, hay ciertas cosas que puedes hacer para tratar de sobrevivir.

Aférrate a un objeto que flote. Usa un objeto flotante como una balsa para mantenerte fuera del agua. Los objetos que flotan como los troncos de los árboles, las puertas, los equipos de pesca, etc. pueden estar a la mano en el agua.

Sobrevive a las secuelas del tsunami

1 Prepárate para las réplicas y las olas adicionales. Un tsunami viene en olas. Es posible que haya una oleada constante que dure varias horas y la próxima ola puede ser más grande que la anterior.

2 Trata de conseguir información confiable. Escucha la radio para recibir actualizaciones del suceso. No confíes en lo que digan las personas. Es mejor esperar que regresar demasiado pronto y quedar atrapado(a) en las olas futuras.

3 Espera a que las autoridades locales emitan una señal que indique que "pasó el peligro." Solo entonces debes regresar a tu hogar. Averigua con anticipación la manera en la que las autoridades locales planean anunciar dicha señal. No olvides que probablemente las carreteras estén demasiado dañadas por las olas del tsunami, por lo que quizás tengas que tomar otras rutas alternativas. Un buen plan de emergencia debe compensar esta posibilidad con rutas y puntos de reunión alternativos.

4 Ten en cuenta que el proceso de supervivencia sigue luego del tsunami. Después de que el tsunami se calme, habrá escombros, edificios destruidos e infraestructuras averiadas. También habrá cadáveres. El suministro de agua limpia puede estar destruido o interrumpido. Es muy probable que los suministros de alimentos estén agotados. Las probabilidades de enfermedad, trastorno de estrés postraumático, aflicción, hambre y lesiones harán que el periodo posterior al tsunami sea tan peligroso como el tsunami en sí mismo. Un plan de emergencia también debe tener en cuenta las secuelas y lo que necesitarás para proteger a tu familia, tu comunidad y a ti mismo(a).

5 Reúne a la comunidad tras un plan de rehabilitación. Si las autoridades locales no ponen en marcha planes de acción, sugiere que lo hagan o forma un grupo de acción comunitaria para considerar un plan para la época posterior a un tsunami. Los puntos que pueden ayudar a la supervivencia tras el tsunami incluyen:

Establecer con anticipación una reserva de agua limpia. Ya sea que se trate de agua embotellada o filtrada, en tu comunidad debe haber un suministro de agua para emergencias.

Abrir hogares y edificaciones en buen estado a otras personas. Ayuda a las personas con dificultades y dales albergue.

Asegurarse de que existan generadores eléctricos que permitan cocinar, mantener la higiene y restaurar los servicios básicos de salud y transporte.

Poner en funcionamiento albergues para emergencias y distribuir alimentos.

Poner en funcionamiento los servicios de atención médica de manera inmediata.

Sofocar los incendios y las fugas de gas.

Consejos

Si estás en la playa y ves que la marea retrocede completamente de una manera extraña, evacua inmediatamente. Este no es el momento de investigar, sino de correr en la otra dirección.

También evacúa a tus niños. Esfuérzate por permanecer junto a ellos y dales instrucciones claras y sencillas. 

También asegúrate de que tus niños sepan a qué sitio deben ir si se separan de ti. Ya que quizás no puedas aferrarte a las manos de tus niños contra el embate del agua, enséñales con anticipación la manera de aumentar sus posibilidades de supervivencia si se separan de ti.

Cuando escuches una alarma oficial de tsunami, no la ignores ni te demores en actuar. Prepárate para evacuar el área y busca un refugio en un lugar alto alejado de la costa. 

Es mucho mejor demostrar que estabas preparado(a) para un tsunami que no ocurrió que tratar de probar que eres más fuerte o inteligente que la naturaleza y morir en el intento. No corras hacia el agua para salvar objetos.

La primera vez que escuches que se avecina un tsunami, agarra tus paquetes de emergencia y conduce hacia una ciudad o un pueblo alejado de la costa y espera hasta que las autoridades anuncien la señal de que "pasó el peligro".

Si ves que la marea se aleja rápidamente, quiere decir que regresará pronto para embestir la costa.

Enséñale a los niños a reconocer las señales de un tsunami inminente. Una niña de 10 años llamada Tilly Smith salvó a su familia junto con la vida de otras personas en el tsunami de 2004 porque puso atención a su clase de geografía.

Mientras te alejas muy rápidamente del mar, adviérteles a todas las personas que puedas. Grita claramente: "¡Tsunami! ¡Vayan a un lugar alto!" mientras sigues evacuando. Cuando la marea retroceda de repente, en el mejor de los casos tendrás un par de minutos antes de que llegue el tsunami.

Si se detecta un tsunami distante, se les dará la alarma a las ciudades principales algunas horas o minutos antes de que el tsunami llegue a la costa. ¡Presta atención a esas alarmas!

Advertencias

No esperes las alarmas. Si crees que un tsunami se avecina, evacua de inmediato.

La principal causa de muerte durante un tsunami es el ahogamiento. La segunda causa son las lesiones provocadas por los escombros.

Siempre escucha las instrucciones y los consejos de la policía cuando un tsunami se avecine. 

Generalmente las instrucciones de las autoridades se imparten por la radio, así que permanece atento(a) a este medio de comunicación

Cosas que necesitarás

Comida

Agua limpia

Un botiquín de primeros auxilios (por cada familia o grupo)

Ropa seca y tibia, ponchos o de ser posible, un abrigo impermeable (por cada persona)

Las medicinas que necesite regularmente cualquier persona, como los inhaladores de asma o los medicamentos para el corazón

Linterna y baterías (por cada familia o grupo)

Suministros de comida y agua para emergencias

Dos pares de mudas de ropa (por cada persona)

Un par de imanes potentes (por cada familia o grupo)

Radio de baterías o manivela (por cada familia o grupo)

Almohada inflable (por cada persona)

Teléfono móvil

Mantas

Navaja multiusos (cuchillo del ejército)

Dinero para emergencias

Copias de información importante, por ejemplo: certificados de nacimiento, testamento e identificaciones

Referencias

UNDP, UNDRO, (1992) Una visión general del manejo de desastres, p 35 (PDF)

https://hazards.fema.gov/femaportal/wps/portal Plataforma de información cartográfica

http://environment.nationalgeographic.com/environment/natural-disasters/tsunami-profile/

UNDP, UNDRO, (1992) Una visión general del manejo de desastres, p 35 (PDF)

http://www.conservation.ca.gov/cgs/geologic_hazards/Tsunami/Documents/TsunamiBrochure.pdf

Diana L Guerrero (Ark Animals), Predicción animal de tsunamis y terremotos en Ark Animals

http://www.conservation.ca.gov/cgs/geologic_hazards/Tsunami/Documents/TsunamiBrochure.pdf

http://pubs.usgs.gov/circ/c1187/#roads

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

Servicio geológico de los Estados Unidos, Circular 1187, Versión 1.1 (2005), Sobreviviendo a un tsunami – lecciones de Chile, Hawái y Japón

UNDP, UNDRO, (1992) Una visión general del manejo de desastres, p 35 (PDF)

http://news.nationalgeographic.com/news/2005/01/0118_050118_tsunami_geography_lesson.html

UNDP, UNDRO, (1992) Una visión general del manejo de desastres, p 35 (PDF)

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Una Mirada política de El Fenómeno Climático El Niño

Los expertos peruanos llaman "El Niño costero" al fenómeno, según el Comité Multisectorial para el estudio del Fenómeno de El Niño (ENFEN). El presente articulo fue publicado en setiembre del 2006 y a la fecha 2019 su esquema e interrogantes aún están vigente.

 ¿Estamos Preparados? Durante un fenómeno de El Niño, aumenta la temperatura del agua en toda la franja ecuatorial del océano Pacífico, hasta la costa norte de Estados Unidos, y los efectos se sienten en todo el mundo: lluvias monzónicas débiles en India, inviernos más fríos en Europa, tifones en Asia y sequías en Indonesia y Australia, entre otras calamidades. Pero cuando el calentamiento ocurre solo en la zona costera de Perú y Ecuador, las anomalías (lluvias torrenciales) se restringen a estos territorios. 

Indudablemente, el fenómeno climático conocido como El Niño (FEN), no es nuevo (exploradores españoles informaron sobre este fenómeno en 1525-1526), pero después de ser una causa relativamente silenciosa de destrucción durante cientos de años, cobró fama repentinamente en los últimos meses de 1997 y especialmente en el primer trimestre de 1998, era difícil encontrar una red de noticias en los que no presentase un informe sobre El Niño un artículo de fondo cinco o seis veces por semana “El Niño” se convirtió en un término común en gran parte de Occidente.

El fenómeno ocurre cada cinco años , aproximadamente, casi moderado (agua marítima superficial 2 a 3 grados centígrados por encima de lo normal) y con efectos locales solamente. como ya indicamos, un evento extremo en el Perú modifica las características meteorológicas a nivel mundial y genera “anomalías ” (tormentas, inundaciones, sequías) no solo en América (incluidos los países andinos, Brasil, Paraguay y Argentina) sino también, mediante “teleconexiones” atmosféricas , en África, Asia e incluso Australia (ver Glantz, 1996, para un tratamiento completo del tema).

TRES OBSERVACIONES SOBRE EL EPISODIO DE 1997 – 1998

Tres aspectos del fenómeno de El Niño (FEN) más reciente son particularmente dignos de mención .

En primer lugar, perdido en medio del bombardeo de los medios de comunicación generado por el FEN de 1997–1998, se encuentra el hecho de que el evento de 1982 – 1983 fue considerado “el FEN del siglo”. Las pérdidas acumuladas se calcularon en $ 13.000 millones. Sin embargo, la magnitud, el alcance y la duración del impacto del FEN de 1997 – 1998 son por lo menos de la misma magnitud que las de 1982–1983. Por lo tanto, hemos visto dos “FEN del Siglo “ en el lapso de 15 años, lo cual nos hace dudar, especialmente si la comunidad científica puede establecer una conexión de los FEN con el recalentamiento del planeta y el cambio climático. Sin embargo, podemos decir al menos que los episodios del FEN constituyen un riesgo de recurrencia permanente.

En segundo lugar, debido al amplio alcance de las consecuencias de los FEN, esencialmente a nivel sectorial, la mitigación de un FEN requiere un enfoque integral y sumamente coordinado que incluya dependencias gubernamentales múltiples, el sector privado y organizaciones nacionales e internacionales tanto intergubernamentales como no gubernamentales. Es decir, la gestión de los FEN requiere el mismo enfoque (idealmente) que la gestión de desarrollo en general. Aunque el crecimiento y la prosperidad a nivel económico pueden mitigar el impacto del los FEN, o al menos facilitar la recuperación a nivel global, solo un enfoque altamente coordinado de los sectores internacional, gubernamental y de la sociedad civil proporcionará protección a los sectores más pobre y vulnerables de la población.

En tercer lugar, y lo que es más importante (debido a su carácter recurrente, si bien impredecible, y al cada vez mayor tiempo de advertencia que resulta del uso de las nuevas tecnologías), los episodios del FEN son excelentes candidatos para la mitigación. sistemática.

Después de todo, en comparación con los principales terremotos, que a menudo presentan intervalos de recurrencia medidos en cientos de años, los episodios principales del FEN se repiten cada diez años aproximadamente. Si bien esto todavía excede la esperanza de vida de la mayoría de los gobiernos, un adulto tipo podría observar tres o cuatro FEN de envergadura durante su vida y probablemente experimentar al menos algunos de sus efectos. Por consiguiente, es conveniente reiterar que el tiempo transcurre de dos maneras posibles: durante un FEN; o ;entre dos FEN.

EL EPISODIO DE 1982 – 1983 :

¿HUBO APRENDIZAJE EN EL INTERVALO ENTRE DOS FEN?

Sería tranquilizados afirmar que se extrajeron enseñanzas importantes, a partir del FEN de 1982 – 1983, sobre medidas a tomar y programas a implementar. Lamentablemente, no fue así. Con escasas excepciones, y principalmente a nivel local, la infraestructura y los bienes económicos perdidos en el FEN de 1982-1983 sencillamente se repararon o se reemplazaron in situ, sin considerar seriamente la mitigación de futuros FEN.

El desarrollo y la capacidad institucional para abordar el tema de los desastres tampoco demostraron aprendizaje serio a partir del FEN de 1982-1983. Las organizaciones y los sistemas de defensa civil se fortalecieron mínimamente y no recibieron ningún tipo de instrucción para la mitigación. En otras palabras, carecían de recursos y continuaron siendo sistemas de respuesta de bajo perfil con capacidad prácticamente nula para la coordinación previa al episodio o para ejercer alguna influencia en la adopción de medidas.

La mayor enseñanza del FEN de 1982-1983 se manifestó en las comunidades científicas.

Sin embargo, las observaciones sobre el terreno durante el FEN de 1997-1998 revelaron una situación algo diferente, donde la falta de canales institucionales permanentes (y desacuerdos científicos a principios de 1997) retrasó el flujo de información lo cual puede explicar uno de los problemas más destacados del FEN de 1997-1998 fue una lectura gubernamental incorrecta de la experiencia previa.

Desde mediados hasta fines de 1997, se participó en una variedad de actividades para la mitigación física (por ejemplo, limpieza de canales, reparación de diques). Lamentablemente, supusieron que el FEN de 1997-1998 que se estaba formando sería una repetición del episodio de 1982-1983, cuando en realidad resultó ser bastante similar al episodio de 1925- 1926. Como consecuencia, gran parte de la actividad de mitigación se llevó a cabo en el lugar incorrecto.

La enseñanza más importante, como señalamos anteriormente, es que mientras los FEN son fenómenos de alcance regional a mundial, son sus efectos locales específicos los que son tan problemáticos, y estos efectos locales 1) varían extraordinariamente de FEN a FEN, 2} son difíciles de predecir excepto en el muy corto plazo (de horas a uno o dos días)y 3) constituyen los verdaderos desastres / catástrofes asociados con episodios FEN.

Por consiguiente, la mitigación de los FEN debe realizarse a largo plazo, debe ser de alcance regional y nacional y estar informada por la comunidad científica acerca de datos históricos. Para expresarlo claramente, las regiones que experimentan regularmente efectos significativos de los FEN siempre deben estar preparándose sistemáticamente (mitigación y preparativos) para el siguiente episodio.

¿ESTAREMOS PREPARADOS INSTITUCIONALMENTE PARA HACER FRENTE AL FENÓMENO DE EL NIÑO DE GRAN ENVERGADURA?

A fin de responder a la pregunta de manera completa y justa, debemos recordar una tipología de episodios especialmente útil Basándose en estudios anteriores de respuesta institucional a sucesos extremos, el veterano investigador de desastres Hemy Quarantelli (1987) clasificó en una oportunidad tales sucesos de acuerdo con sus necesidades de respuesta.

En su esquema, los accidentes son tratados típicamente por organizaciones ya establecidas de respuesta de las que normalmente se espera que participen en un suceso (por ejemplo, servicios de policía, de bomberos, paramédicos).

Las emergencias requieren el agregado de capacidades institucionales latentes, por ejemplo la Cruz Roja, El Ejército o Defensa Civil.

Los desastres, en cambio, incluyen no sólo la participación y las actividades de respuesta esperadas y las organizaciones latentes, sino también la asistencia de organismos y/o organizaciones de respuesta que se extiendan; hasta el área del impacto, por ejemplo empresas de construcción privadas o empresas de servicios públicos que participan en actividades no habituales.

Las catástrofes son tan graves que se caracterizan por la aparición de organizaciones e incluso de movimientos sociales enteramente nuevos.

Si bien esta tipología no encaja exactamente en el contexto nacional, la lógica del umbral sí lo hace y ayuda a aclarar lo que sucedió con defensa civil durante el FEN de 1997-1998, lo que posiblemente suceda en episodios futuros, y también lo que se puede hacer para romper el patrón de funcionamiento.

La clave es una barrera de protección política entre las dos primeras y las dos últimas categorías de acontecimientos. Hay una cierta tautología en la explicación, pero dado que los intereses políticos que se incluyen en la respuesta a accidentes y emergencia son generalmente bajos, defensa civil se activará en casos de emergencia y permanecerá a cargo; Sin embargo, si un acontecimiento supera el umbral de emergencia y se convierte en un desastre, los intereses políticos aumentan significativamente, y el gobierno no puede permitir que la respuesta al suceso permanezca en manos de una organización con bajo perfil político o escasa experiencia.

Esa lógica se toma aún más pronunciada si el suceso resulta ser una verdadera catástrofe, con todas las repercusiones políticas que conlleva (especialmente la posible creación de grupos autónomos de ciudadanos u organizaciones de movimiento social).

Resulta interesante ver que la lógica del umbral aclara por qué el FEN de 1997-1998 fue calificado como desastre. Con la profundización de los efectos a fines de 1997 y principios de 1998, el FEN pasó de ser una serie de emergencias relativamente localizadas (y por lo tanto incluyendo a defensa civil) a ser un desastre que requería la atención de las autoridades a nivel nacional.

Entonces, ¿qué significan el análisis hecho hasta aquí y la adaptación de la lógica del umbral de Quarantelli para el futuro de las organizaciones de defensa civil?

Una opción consiste en reconocer que las organizaciones de defensa civil son todavía las únicas organizaciones permanentes de respuesta a emergencias, y deben adoptarse iniciativas para fortalecerlas, aceptando el hecho de que en un desastre o catástrofe probablemente se margine una vez más a la defensa civil.

Sin embargo, la idea es mejorar las capacidades de defensa civil de modo (que menos episodios superen la barrera de protección). Es decir, dado que los niveles del episodio y por consiguiente la barrera de protección están determinados por los requisitos de respuesta frente a las capacidades de respuesta, si defensa civil puede mejorar sus capacidades, habrá menos emergencias que se conviertan en desastres o, peor aún, en catástrofes.

La segunda opción comienza como la primera (fortalecimiento de defensa civil), pero agrega una visión enteramente nueva que requiere un cambio fundamental en la imagen de defensa civil ( Ver articulo Nuevo Enfoque de la Defensa Civil Prof. Lincoln Alayo Bernal GOOGLE ). En estas condiciones, los líderes de defensa civil buscarían mejorar las capacidades de respuesta pero también comprender y aceptar que un desastre o una catástrofe se politiza rápidamente.

Sin embargo, anticipan explícitamente y planifican para actuar, de modo que ese cambio sea central a nuevas estructuras u organizaciones (y de ese modo evitar que se los margine). Bajo esta opción, a medida que un episodio se aproxima a la barrera de emergencia-desastre, es la defensa civil misma la que enuncia algo como: "Sr. Presidente, la situación escapa a nuestras capacidades y requiere respuesta y atención en el ámbito regional y nacional.

Indudablemente, es muy difícil que esta opción garantice el éxito, pero al menos convierte a defensa civil en un participante activo en lugar de una víctima pasiva cuando un episodio supera la barrera política. Dado que defensa civil en realidad planea una expansión rápida y global para ayudar a todo el gobierno a hacer frente a un desastre o catástrofe. SEPTIEMBRE 2006.

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